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Analistas bajan previsión del PIB y MEF dice que desacelere es esperado

Economistas y bancos privados corrigieron a la baja las proyecciones de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y esperan sea de 2,95 %. El ministro de Economía, Mario Bergara, indicó que la desaceleración observada en el primer trimestre está dentro de lo pronosticado.

De acuerdo a la Encuesta de Expectativas Económicas que realiza el Banco Central (BCU), correspondiente a junio, los analistas y bancos privados prevén que el PIB tenga una suba de 2,95% este año, de acuerdo a la mediana de las respuestas (se ordenan de menor a mayor y se toma la del centro).

Este guarismo es 0,2 puntos inferior al que se había pronosticado hace un mes atrás que era de 3,15%. En tanto, la proyección más alta realizada prevé que el PIB crezca 3,2% y el crecimiento más bajo pronosticado es de 2,5%.

El enfriamiento de la economía uruguaya que preveían la mayoría de los analistas ya se observó en los resultados correspondientes al primer trimestre del año. Incluso, en la comparación frente al último trimestre del año pasado, el PIB cayó 0,4%.

En cambio, en la comparación frente al primer trimestre del año pasado, la economía creció 2,4%.

Aún así, es una desaceleración ya que en el último trimestre de 2013 (frente al último de 2012) el PIB se había incrementado en 4,6%.

El ministro Bergara sostuvo ayer que los datos de los primeros tres meses del año «indican justamente esa desaceleración que se pronosticaba», pero «con tasas que son absolutamente decentes, tanto en el contexto global, regional, como también en la perspectiva histórica de la economía uruguaya», afirmó.

«Obviamente el crecimiento no va a tener los guarismos de la década anterior. Eso es razonable y es un poco lo que ya estamos viendo, y que todos adelantábamos. La tasa de crecimiento de la economía va a ser sensiblemente menor en estos períodos. Creemos que los datos de este primer trimestre siguen siendo consistentes con un pronóstico de crecimiento de la economía uruguaya para 2014 en el entorno de 3%, que sería una tasa muy razonable en todas estas perspectivas», añadió Bergara, durante una conferencia organizada por la Cámara Oficial Española de Comercio, Industria y Navegación.

Teniendo en cuenta el resultado verificado en lo que va del año y de mantenerse estable en los siguientes tres trimestres, la economía uruguaya se asegura un piso de crecimiento de 0,9% para todo el 2014.

En términos absolutos, el PIB totalizó US$ 55.594 millones en los 12 meses cerrados a marzo, mientras que el PIB per cápita se situó en US$ 16.331. La corrección a la baja en las proyecciones de crecimiento del PIB también coincide con las efectuadas por economistas y bancos del exterior.

Según el consenso de respuestas relevadas en el informe LatinFocus Consensus Forescast elaborado por la consultora FocusEconomics el PIB tendrá un crecimiento de 3,3%, 0,1 punto menos de lo que se había proyectado en mayo.
Inflación sin cambios.

En tanto, los economistas y bancos que respondieron la encuesta mensual de expectativas de inflación del BCU esperan que el Índice de Precios al Consumo (IPC), aumente 8,2% en el año, un guarismo muy similar al que se había pronosticado el mes pasado que era de 8,23%, tomando como referencia la mediana de las respuestas.

Quien prevé un registro más alto estima que el año se cierre en 8,7%, mientras que la hipótesis de mínima es de 7,97%.

En todos los casos los pronósticos se ubican por fuera de la meta fijada por el BCU que es de entre 3% y 7% para todo el año.

Para el mes de junio, los analistas esperan que la suba de precios sea de 0,35% en la mediana de las respuestas. La proyección más alta es de 0,5% y la más baja fue de 0,12%.

Bergara reiteró ayer que el gobierno tiene «la obligación de prestar la mayor atención al proceso de presiones inflacionarias».

«Está claro que los datos de inflación son los que están generando un poco más de preocupación y tampoco nada que esté fuera de control, ni mucho menos, pero la inflación está un poco más alta de lo que las autoridades y la sociedad en general desean», afirmó.

«Creemos que hay razones entendibles por las cuales estas presiones inflacionarias se están dando. Tratamos de combatirlas con instrumentos tradicionales desde la política económica y fiscal, y medidas de corto plazo que apuntan a influenciar las expectativas de los agentes formadores de precios», añadió el ministro.

El aumento del IPC de 0,32% en mayo mantuvo la inflación en 12 meses en 9,18%. El índice de precios se mantiene alto y en los primeros cinco meses del año el incremento acumulado es de 5,01%, el mayor registro a mayo desde el 2007, cuando había sido de 5,38%.

A principios de junio, el gobierno solicitó a representantes de las grandes superficies, importadores y sectores de la industria que traten de mantener los precios en algunos productos de la canasta básica hasta fin de este mes. Al mismo tiempo, se dispuso una reducción promedio de 5,5% en las tarifas eléctricas de UTE que estará operativa desde el 1° de julio y que será otro elemento de ayuda en el combate a la inflación.

Por otra parte, en el caso de las finanzas públicas, la encuesta dio una estimación de déficit equivalente a 3,04% del PIB para este año y de 2,51% para el año próximo, según la mediana de las respuestas.

EL PAÍS

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