El acto de generosidad de un jefe con su empleada

Michael De Beye es propietario de un restaurante de la cadena Kaiserhof, en Texas, Estados Unidos. A una de sus empleadas, Brittany Mathis, de 19 años de edad, le detectaron en diciembre un tumor cerebral, pero al no tener seguro médico no puede pagar el tratamiento.

Movilizado por la situación económica de la joven, De Beye decidió poner el negocio a la venta como forma de juntar dinero para que pueda recibir la atención médica necesaria, según transcendió en los medios de prensa locales.

En declaraciones al canal de televisión KHU Texas, el dueño local comercial explicó: “No podría vivir conmigo mismo y nunca sería feliz ganando dinero en mi restaurante sabiendo que ella necesita ayuda”.

Barbara, la madre de Brittany, que también es empleada del restaurante junto con otra de sus hijas, dijo que la decisión de su jefe era “una bendición para toda la familia”.

En el 2000, con solo 33 años de edad, el marido de Barbara y padre de las tres jóvenes falleció de aneurisma cerebral.

Fuente El observador