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El SMS más esperado: cómo aguardó sus 500 votos el Partido de la Concertación

La alianza blanca y colorada logró superar la cifra necesaria para postularse

Alberto Maschwitz amaneció temprano y confiado. Para el presidente del Partido de la Concertación, la noche del sábado fue la más corta en cuanto a descanso, según contó desde su hogar en Pocitos a El Observador. El plan para la jornada electoral de ayer era el siguiente: con la ayuda de algunos miembros de su familia y un pequeño grupo de integrantes del consejo directivo del partido, desde la madrugada estarían llamando a sus votantes para recordarles que sí o sí debían llevar la hoja de votación a sus respectivos circuitos, ya que una vez en el “cuarto secreto” no las encontrarían en las mesas.

Una vez avisados, los electores debían mandar un mensaje de texto con dos simples palabras: “Ya voté”. Esta era una medida necesaria para ir pronosticando durante el día el logro o fracaso del partido accidental, aclaró el nacionalista y exministro de la Corte Electoral.

Nacido desde una unión entre blancos y colorados, el Partido de la Concertación se creó con un objetivo claro desde el principio: ganar las elecciones departamentales de mayo de 2015 y gobernar la Intendencia Municipal de Montevideo, que desde 1990 es gestionada por el Frente Amplio. Tras cumplir con las formalidades exigidas por la Corte Electoral para ingresar como partido político, el domingo el nuevo lema debía reunir al menos 500 votos para poder cumplir con ese propósito. El objetivo fue cumplido. En la mañana de este lunes ya se registraban 512 voluntades, según los datos de la Corte Electoral.

Al haber encontrado su postulante presidencial en el militante blanco José Luis Vera, el lema no buscó competir en las internas ni intentará posicionarse en la elección nacional. Su único desafío fue conseguir los votos necesarios para participar en la elección departamental de mayo de 2015. Para ello debieron recurrir a cada uno de los inscritos en las listas de color verde del Partido de la Concertación.

“Cada una de las personas que figuraban en la lista como candidato a convencional tiene la carga de votarlo y avisarnos por un mensaje de texto que votó”, señaló Vera.

El partido se presentó solo con una lista para las elecciones nacionales y otra para las departamentales. Las hojas de votación de color verde de la 3002 y la 3004 no se encontraban ayer en los circuitos de votación. De acuerdo a lo señalado por Vera, el propósito era no interferir con las elecciones internas de ninguno de los partidos.

Para hacerse de ellas, los votantes contaron con pocas opciones: llevar las listas consigo desde sus casas o pasar tanto por la casa del presidente del partido, Alberto Maschwitz, como por la Casa del Partido Colorado, ubicada sobre la calle Andrés Martínez Trueba.

Allí, el colorado Julio Herrera, quien encabeza la Convención Departamental del partido, armó temprano en la mañana una pequeña y austera mesa con decenas de listas de color verde, que entre tanto decorado rojo tenían poca presencia cromática.

“Apenas hemos impreso unas 3.000 listas. Normalmente se dice que hay que imprimir 10 veces más de lo que se necesita. Nosotros no lo hicimos. Estamos dando mano a mano, boca a boca, de manera de que la gente pueda entender, comprender y depositar el voto en la urna”, explicó Herrera, exministro de Industria, al hablar sobre la estrategia de difusión seguida por esta coalición.

“Vamos a conseguir los votos. Hoy nace el Partido de la Concertación y el año próximo tendremos una elección municipal donde vamos a competir con los candidatos del Frente Amplio”, auguró convencido Herrera.

Del lado de los blancos, el exministro de Educación, Antonio Mercader, pronóstico el mismo resultado exitoso para el nuevo partido: “Creo que llegamos bien a los 500 votos. Si no llegamos no sé qué hacemos, nos exiliamos”, ironizó Mercader, quien encabeza la Convención Nacional del partido.

El político indicó que el partido despertó mucho interés en la opinión pública y que la falta de “publicidad y convocatoria” se debe a la necesidad de no tener que competir en las internas, de manera de no “fagocitar” a los partidos que le dieron vida a la Concertación.

Por su parte, Vera mencionó que, más allá del resultado, la alianza entre blancos y colorados se constituyó en un proceso histórico.

“Los contemporáneos no lo perciben, pero si lo miramos con cierta perspectiva, esto nunca se dio en la historia. Nunca hubo un acuerdo para juntar a dos lemas tradicionalmente rivales”, mencionó el abogado del Tribunal de Cuentas, quien aseguró que su voto en la urna fue para el Partido de la Concertación.

EL OBSERVADOR

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