Gobierno descontará a registrales por paros; casamientos cancelados

El Ministerio de Educación y Cultura (MEC), del que dependen el Registro Civil y la Dirección General de Registros, decidió realizar descuentos en los salarios de los funcionarios de esas dependencias debido a las medidas distorsivas que vienen realizando desde el pasado 6 de octubre en el marco del conflicto salarial que mantienen con el Poder Ejecutivo.

Los descuentos, que se efectuarán a unos 900 funcionarios, es en aplicación de un decreto de 2008 del gobierno de Tabaré Vázquez.

El director general de secretaría del MEC, Pablo Álvarez, dijo a El País que «cualquier tarea no generada debe ser descontada porque así es el contrato que tiene el funcionario con el Estado». Hasta ahora a los trabajadores se les había descontado por los paros, pero no por la distorsión. Álvarez explicó que el 15% de descuento de los salarios que se efectivizará desde enero, surge de una «aproximación al nivel de afectación generado por las tareas que los funcionarios deben realizar y no cumplen».

En el marco del conflicto con el Poder Ejecutivo en reclamo del aumento establecido en la ley de Presupuesto vigente desde 2011, los funcionarios de la Dirección General de Registros han afectado la operativa de esa oficina, cosa que ha trabado miles de transacciones vehiculares e inmobiliarias.

Los trabajadores del Registro Civil, por su parte, también han realizado medidas distorsivas dejando de inscribir parejas para casamientos, y también suspendieron el ingreso de documentación por parte de extranjeros que quieren tramitar la residencia en Uruguay.

El secretario general de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), José Lorenzo López, dijo a El País que el gremio rechaza los descuentos por el decreto de 2008 porque es una norma que «limita el derecho de huelga».

«Hay que ver sobre qué se aplica, porque el decreto aplica los descuentos en función de la distorsión causada y no en base a las horas de paro, como debería ser», señaló López, a quien se le transmitió el lunes la decisión del MEC de realizar los descuentos a los registrales.
Sin casamientos.

Ayer, el secretario de la Presidencia, Homero Guerrero, recibió en la Torre Ejecutiva a los gremios registrales y les transmitió que el gobierno ya realizó los cálculos para comenzar a pagar con el aumento, pero resta el visto bueno del presidente José Mujica, que hoy a primera hora regresó de México.

López, que fue el vocero sindical luego de la reunión, dijo que los funcionarios reclaman que se les indique una fecha para comenzar a cobrar con el aumento, cosa que «descomprimiría bastante la situación».

Como eso no ocurrió ayer y Guerrero planteó la necesidad de una ley que habilite los pagos, «todavía no hay nada como para determinar claramente que se puedan suspender las medidas, que se mantienen en todos sus términos», agregó el secretario general de COFE en una rueda de prensa realizada tras la reunión.

Así, los funcionarios del Registro Civil pararán a partir de mañana jueves, el viernes, el sábado y el domingo, medida que suspenderá unos 100 casamientos en Montevideo y el área metropolitana.

Los funcionarios de la Dirección de Registros, mientras tanto, mantienen la medida gremial que iniciaron el lunes y por la que no están liberando información registral, cosa que paralizó los negocios de compra-venta de vehículos usados y de propiedades.

El conflicto es producto de la equiparación salarial de los funcionarios registrales a los judiciales, que su vez están «enganchados» a los salarios de los ministros de la Suprema Corte. La ley de Presupuesto vigente desde 2011, aumentó los salarios de los ministros de Estado sin tener en cuenta que a ellos están igualados los integrantes del máximo órgano judicial, lo cual derivó en un efecto cascada de aumentos.

Los jueces, que también reclaman el incremento del 26%, comenzaron ayer y mantendrán hasta mañana una medida de suspensión de audiencias que tuvo un alto acatamiento.

EL PAÍS