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Luis está en boca de todos

La inclusión de Luis Suárez en el equipo de Barcelona junto a Lionel Messi y Neymar ya abrió el debate en el mundo fútbol, justo en un momento para nada fácil en el conjunto catalán.

El periodista español Pichi Alonso analizó en el diario AS la inclusión de Luis Suárez en el equipo de Luis Enrique, dejando en claro que un debate es algo perverso teniendo en cuenta las dos derrotas al hilo que acumula Barcelona. “Es una realidad tan inevitable como superficial. Luis Suárez es un crack contrastado que solo exige de tiempo para explotar en un sistema como el del Barça”, escribió Alonso.

“La primera premisa es que Luis Suárez se sienta cómodo en la disposición táctica de Luis Enrique. A partir de ahí, todo es crecer con el paso de las semanas. A día de hoy, muchos son los aficionados que se cuestionan cómo es posible fichar a un delantero goleador y, a la primera de cambio, esconderlo en la banda. Viendo el historial del uruguayo, uno confirma que el delantero está acostumbrado a moverse con total facilidad en cualquiera de las posiciones de ataque. Esa es precisamente la gran virtud que debe explotar el Barça”, continúa analizando el español.

En el análisis, el periodista escribió también que “los esfuerzos defensivos de Luis Suárez, Neymar y Messi deben rentabilizarse. El uruguayo garantiza carácter y trabajo pero si no se coordina con el resto de los compañeros, su trabajo carece de sentido. Recordar la historia más reciente puede aportar soluciones inmediatas. Por ejemplo, la mejor presión del Barça siempre ha llegado cuando se intensifica el trabajo y la tensión poco después de la pérdida de balón. La recuperación es mucho más efectiva y el desgaste físico menor. Ceder segundos obliga a un repliegue, mayor cobertura de campo y, por consiguiente, el cansancio se deja sentir mucho antes. El trío debe dosificarse”.

Por último, Pichi Alonso cerró su columna sentenciando que “el equipo tiene que explotar al máximo el orden y los recursos físicos. Luis Suárez puede encajar sin problemas, pero siendo conscientes de la necesidad de proteger un centro del campo vulnerable”.

EL PAÍS

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