Gobierno adjudica resultado electoral a políticas sociales

Basados en el crecimiento electoral que el Frente Amplio tuvo en varios departamentos del país y particularmente entre los sectores más pobres, desde el gobierno consideran que las políticas sociales llevadas adelante por la izquierda son la mejor explicación de la votación del pasado 26 de octubre que le dio una vez más la mayoría parlamentaria.

“La elección fue un síntoma de la gestión del gobierno. Si uno mira la evolución electoral en los últimos diez años, encuentra que los cinco departamentos en los que más creció el Frente Amplio fueron Cerro Largo, Artigas, Tacuarembó, Salto y Rivera. Si se toma el último quinquenio, se le agregan Colonia, Soriano y Lavalleja. Y eso uno debe compararlo con los logros sociales. No con los económicos, porque la gente no vota por el PBI”, dijo el ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, en El Observador TV.

Durante una entrevista realizada por el periodista Leandro Gómez, el jerarca recordó que durante el gobierno del nacionalista Luis Alberto Lacalle, el Producto Bruto Interno (PBI) también creció pero la gente votó por otro partido. “En estos ultimos cinco años hubo mayor caída del desempleo, mayor caída de la pobreza, mayor caída de la mortalidad infantil, mayor inclusión educativa. Si uno hace un ranking de estas variables lo que da es que los primeros diez lugares de mejoras sociales y laborales coinciden con el mayor crecimiento del Frente Amplio. Efectivamente los logros del gobierno provocaron un alineamiento de los resultados (electorales)”, dijo Olesker.

Y sostuvo que los estudios realizados por el Frente Amplio en Montevideo, demuestran que las mayores votaciones están en el oeste de la ciudad.
“Por ejemplo, tuvo el 63% de los votos en Marconi y Casavalle, donde había tenido menos del 40% hace diez años. Hubo un reordenamiento de los votos y eso está ligado a lo social”, manifestó el ministro.
Olesker recordó que durante la campaña electoral se discutió en la interna de la coalición si lo más propicio era resaltar lo ya hecho o poner el énfasis en lo que se haría en el futuro.
Incluso, la izquierda cambió su eslogan de campaña inicial que era “vamos bien” por el que reza “Uruguay no se detiene”. “Se rompe un mito de que no hay relación entre el voto y la mejora de las situación de las personas. Incluso en el primer tramo de la campaña se dijo que había que hablar del futuro y no tanto de los logros porque la gente los logros ya los tiene asumidos. Sin embargo, estoy convencido de que el punto de inflexión para que el Frente Amplio despegara en una campaña que había tenido sus vueltas, fue cuando se puso sobre la mesa los logros del gobierno y se vio la presencia del gobierno mostrando estos logros”, insistió Olesker.

El ministro dijo que esos logros fueron exhibidos durante toda la gestión del gobierno y no solamente en época de elecciones. Descartó además que los votos provengan solamente de quienes reciben apoyo directo del gobierno a través de los planes de emergencia.
“La responsabilidad está en la reforma laboral y en la reforma de la salud. Un trabajador de Artigas hoy gana cuatro veces lo que ganaba, tiene licencia sindical y descanso, y además tiene para él, para sus cónyuges y para sus hijos la asistencia de la mutualista. Ese trabajador fue el que nos votó”, dijo Olesker.
“No fueron las tarjetas sociales (las que incrementaron el voto del Frente Amplio) porque además llegan a 70 mil hogares, a 140 mil personas mayores de 18 años, y eso no mueve la aguja. La aguja la mueven las grandes reformas y el reparto de la riqueza”, manifestó el ministro.

Dijo que los más veteranos pueden comparar la actual situación “con lo que ocurrió en la década de los 90” y los que no vivieron aquella época “valoran la continuidad de este gobierno”.
Además, Olesker le otorgó un valor muy importante al impulso que el PIT-CNT le dio “al desarrollo ideológico de la propuesta del Frente Amplio”.

EL OBSERVADOR