Cuba: Damas de Blanco denunciaron acoso en el aniversario de la «Primavera Negra»

A 11 años de la oleada represiva contra sus familiares, el grupo de mujeres opositoras al régimen sufrió detenciones temporarias y abuso policial cuando intentó reunirse para recordar la fecha, indicó Berta Soler, su vocera.

Las disidentes cubanas «Damas de Blanco» conmemoraron este martes el 11 aniversario de la oleada represiva conocida como la «Primavera Negra» ocurrida por estas fechas en 2003, en medio de actos de acoso y detenciones temporales de algunas de sus integrantes, según denunció el grupo.

La vocera del grupo femenino, Berta Soler, dijo a la agencia EFE que 54 «Damas de Blanco» se reunieron este martes en su sede, la antigua casa de la fallecida líder del colectivo, Laura Pollán, en la popular barriada de Centro Habana.

Soler: «Algunas fueron detenidas por unas horas y a otras las regresaron a las zonas donde viven»

Soler explicó que desde primeras horas de esta mañana la vivienda estuvo rodeada de agentes policiales y las calles aledañas permanecieron por varias horas cortadas al tráfico de vehículos y al paso de peatones, mientras se producía un «acto de repudio», con música.

«Fuimos amenazadas, sitiadas, nos gritaron ‘Abajo las Damas de Blanco’ y ‘mercenarias’ para boicotear nuestra actividad«, refirió la disidente.

Denunció que trece mujeres miembros del colectivo que encabeza «no pudieron llegar a la sede, algunas de ellas estuvieron detenidas por unas horas y a otras las regresaron a las zonas donde viven«.

Soler dijo que la cita tenía también el objetivo de recordar que se cumplen dos años del encarcelamiento de Sonia Garro, una de sus compañeras, sobre la que pesan acusaciones de «atentado» y otros delitos, pero aún no le han celebrado juicio.

El movimiento «Damas de Blanco» surgió para reclamar la libertad de sus esposos, hijos o hermanos opositores del llamado «Grupo de los 75» que fueron encarcelados y condenados a largas penas de prisión entre marzo y abril de 2003.

Los últimos prisioneros de ese grupo salieron de la cárcel entre 2010 y 2011 en un proceso de excarcelaciones que fue posible por la mediación de la Iglesia católica cubana ante la dictadura de Raúl Castro y que estuvo apoyado por el Gobierno de España, entonces presidido por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero.