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Udelar: 54,6% se abstuvo o votó en blanco o anulado

El resultado de las elecciones universitarias del pasado miércoles dio cuenta de una gran disconformidad o desinterés por parte de estudiantes, docentes y egresados. El 54,6% de los habilitados no votó, o lo hizo en blanco o anulado.

De 206.678 habilitados, 112.944 no sufragaron o no mostraron preferencia por ninguna de las listas o por la única que se presentaba, como sucedió en varias facultades.

El caso más llamativo es el del orden de egresados, donde de 113.127 habilitados, 36.031 (31,8%) no sufragaron, por lo cual deberán pagar una multa de cinco Unidades Reajustables (UR), equivalentes a 3.605 pesos. En tanto, 31.784 (28%) votaron en blanco y 2.441 (2,1%) lo hicieron anulado.

También fueron muchos, el 38%, los docentes universitarios que no mostraron preferencia por quienes se presentaban. De 6.787 habilitados, 1.528 votaron en blanco y 122 anulado; en tanto, 922 no se presentaron a sufragar, por lo cual también deberán pagar cinco UR de multa.

En el caso de los estudiantes el 46% no se expresó por ninguna de las opciones, por decirlo de alguna manera, dado que en siete de las 14 facultades en las que se votó solo se presentó la Federación de Funcionarios Universitarios del Uruguay (FEUU), el gran ganador de la jornada del miércoles.

En conclusión, de 86.764 estudiantes habilitados, 40.117 no votaron (21,5%) o lo hicieron en blanco (21,3%) o anulado (3%). Quienes no sufragaron se verán impedidos de rendir exámenes durante dos períodos consecutivos.
Sin opciones.

Jonathan Torres, dirigente estudiantil de la Corriente Gremial Universitaria (CGU) -cercana al Partido Nacional- de la Facultad de Medicina, señaló a El País que el resultado de la elección «hace pensar que» su fuerza se debe «presentar en más facultades, puesto que la gran cantidad de votos en blanco, anulados y de jóvenes que ni votan muestra que se está reclamando otra opción».

De hecho, en Agronomía, feudo de la CGU, donde este año no se presentó dado que se le pasaron los plazos para anotarse en la Corte Electoral, la lista 120 de la FEUU, la única opción que había en los cuartos de votación, obtuvo 367 adhesiones contra 906 sufragios en blanco y 144 anulados.

Por otra parte, desde la FEUU, cercana al Frente Amplio, que ganó en todas las facultades menos en Veterinaria, el dirigente gremial Joaquín Toledo, de la Facultad de Derecho, dijo estar «muy, pero muy satisfecho con la votación que hubo no solo en Montevideo, sino en todo el país».

En el orden de egresados la CGU y otras fuerzas aliadas ganaron en Medicina, Derecho y Veterinaria, y los grupos de izquierda en todas las otras. La misma tendencia se repitió en el orden docente. Esto dejaría a la FEUU y a los representantes de la izquierda docentes y egresados en la nueva Asamblea General del Claustro con las manos libres para elegir, sin consensos, al rector que sucederá a Rodrigo Arocena, quien dejará el cargo en agosto a ocho años de haber asumido.

Este panorama hace que suene con fuerza el nombre de Gregory Randall, prorrector de Investigación y presidente de la Comisión Coordinadora del Interior, apuntado por muchos como el «delfín» de Arocena.

Pese a esto, Randall tiene la contra de haberse recibido en Cuba. La carta orgánica de la UdelaR establece que se debe tener un título de alguna de sus facultades y ser exalumno para llegar al cargo de rector. Algunos sostienen que el favorito revalidaría su título.
Izquierda elegirá al rector

Con la cantidad de votos obtenidos, la FEUU y los grupos de izquierda de docentes y egresados podrían elegir al nuevo rector sin llegar a un acuerdo con las otras fuerzas. Sin embargo, algunos advierten que ciertos grupos radicales podrían llevar a una fuerte discusión interna.

Para Joaquín Toledo, de la FEUU, la decisión de los estudiantes dependerá pura y exclusivamente de lo que se pueda acordar con los candidatos en las reuniones previas a la elección.

EL PAÍS

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